Para Antonio Hernández

Te has quedado dormido
para nunca despertar,
ya te fuiste, ya te has ido,
para nunca regresar.

Has luchado, te ha vencido,
días enteros sin final,
pero al fin has descansado
ella no tiene rival.

Fuiste fuerte, fuiste honrado,
fuiste un hombre sin igual,
fuiste tierno, fuiste amable
nadie te puede igualar.

Tus manos de cera fina
sobrepuestas quedarán,
en mi mente dolorida
nunca más me rozarán.

El dolor que hoy nos invade
a ti no te ha de llegar,
pues seguro que tu yaces
en un mundo singular.

Ojala sea un mundo bello,
de colores y de paz,
pues eso te lo mereces
por un saber siempre estar.

Hombre de mirada dulce,
pelo cano y blanca tez,
hombre valiente y sencillo
que nos dejas sin querer.

Con su manto te arropó
esa señora blanca,
en silencio secuestró
la vida que te quedaba.

Enero 1995

Versos varios II

Por cada sonrisa, un abrazo
por cada abrazo, un beso
por cada beso, un deseo
el mío, oír de tus labios te quiero.




Qué es esto que siento
que a tu lado estoy en el cielo
y cuando te marchas
me lleva al oscuro infierno.





Los pulmones necesitan aire
el corazón sangre para latir
y yo el agua que es tu cuerpo
para apagar el fuego que hay en mí.




Quisiera ser pensamiento
para divagar por tu mente
para ver que sentimiento
hacia mi te mueve.

Diciembre 2005

De él para ella (por un buen amigo)

Niebla espesa,
halos de esencia,
mis ojos te buscan,
pero tú no llegas.

Te espero en la tarde,
en los rayos de sol,
en la nube que pasa,
en el viento... tu voz.

Te escribo poemas
nacidos del corazón
y mil veces me pregunto
¿habré perdido la razón?.

Soy un hombre que ha amado,
un señor de cierta edad,
pero esto que me ha pasado
no me ocurrió jamás,
pues siento de ti añoranza,
de tus letras, de tu hablar,
del tiempo que en la distancia
venias conmigo a pasear.

Quizá mañana cuando amanezca
alguien se cruzará en mi caminar,
tal vez un ángel, o una adelfa,
algo que me haga olvidar,
aunque olvidarte... ¡no quiero!,
pero de mi te he de sacar,
sacar este sentimiento
que todavía no sé explicar.

Eso ya... será mañana
hoy aún aquí estás,
en mi mente, en mi alma,
en la música que voy a tocar,
en mi diván de poeta,
en el fuego de mi hogar.

Liberame de tus cadenas
yo no me puedo liberar,
vuelvete mar,
vuelvete tierra,
pero ven a verme...
sólo una vez más.

5/11/2007

Versos varios

Tu silencio, mi silencio
Tu angustia, mi pena
Tu abrazo, el abrazo
Que mi alma espera.




Eres fruto del manzano
Prohibido del Edén
Lo he mordido, probado
Es el sabor de tu piel.




Qué tienen tus ojos
Que hablan sin decir nada
Me miran y hacen temblar
Cada rincón de mi alma.




Que mi pena sea tu alegría,
Que mi llanto tu sonrisa,
Mi desespero tu esperanza
Y si existe otra vida
Que la tuya sea mía.

Noviembre 2005