Te necesito como el aire que respiro a cada segundo, te necesito como el pan que me alimenta día a día, necesito tu abrazo que aun se me niega, necesito tus besos que aun no han llegado, necesito tu risa que es la fuente de las mías, necesito tus ojos que son la luz que me guía, necesito tu voz que me vuelve una niña, necesito la caricia de tu mano tranquila, necesito apoyar mi cabeza muy despacio en tu pecho para escuchar el latido del corazón de un poeta.
Te necesito porque eres mi paz porque anulas cualquier temor porque le has dado a mi vida mil colores e ilusión. Te necesito mi bien te necesito mi amor cojamonos de la mano y caminemos los dos.
Hoy no puedo dormir pensando en ti pensando en mí en las doscientas noches que contigo viví en las tantas mañanas que huérfana me sentí.
Hoy no puedo dormir recordando aquel pasado en el que era feliz que aún siendo estéril el beso hacía a mi corazón latir pero nunca por eso dejé de sentirlo así... tierno como caricia, húmedo como deseo, cálido como el mes de Abril.
En esta nostalgia paseo de nuevo volviendo a vivir aquellos momentos de antaño que me hicieron sonreír, pero hoy amor... hoy no puedo dormir, pensando en ti, pensando en mí.
Son tus palabras sutiles dulces y suaves caricias que das a mi alma y te extraño al no verte visitando mi casa y me emborracho al leerte con los versos que narras. Me deleito entre frases entre música e imagenes, que me llevan a un mundo lejos de los mortales. Me encuentro con Otelo, con Horacio y Ofelia, con Camarón de la isla con Calamaro y Vivaldi, García Lorca visita mi hogar, Becquer, Machado y los que olvido nombrar. Me transformo en hada, en princesa, en lágrima, en llovizna deseada o en ola del mar. Me suspendo en el aire en tus pompas jabonosas de mil colores distintos con perfume de jazmín y rosas. Más yo no escribo elegías ni fábulas, ni cuentos, pero me pierdo en las letras que te nacen de dentro. Hoy mi intento ha sido querer hacerte llegar emulando a quien admiro dando lo que tu me das un poema, un cariño y toda mi amistad.
¿Bailamos? ven, dame la mano, no hay pista de baile, lo sé, no importa, ¿bailamos?. Escucha la música dulce, suave de los sentidos ¿no la oyes? esta ahí si, escucha dentro de ti. Cogeme por la cintura bailemos a ritmo de bolero que yo apoyaré mi cabeza muy despacito en tu pecho. ¿la oyes ahora? yo si puedo venga, ven, probemos bailemos, bailemos. ¿que no te gusta el bolero? pues probemos un vals, pero debes ponerte elegante ¿que tal te sienta el frac?. Un dos tres, un dos tres y empezamos a girar toda la sala es nuestra ¡que más da si es la de estar! si me miras a los ojos todo desaparecerá solo estaremos los dos y nuestro baile singular. Bailaremos entre nubes o entre mantos de coral, alrededor de la luna o sobre el agua del mar. ¿Bailamos? ¡tengo ganas de bailar!.
Dulce poetisa soñada, A ti, jilguero de la mañana Porque ahogas tu grito en la nada, A ti, luciérnaga hermosa Que alumbras mi cara, A ti, mujer etérea y volátil Que haces soñar a mi alma, A ti, que con tus palabras Llenas mis ojos de lágrimas, No por sufrir, ni dolor, Si no por la ternura que emanas, A ti amiga lejana En la que halle la calma, Que me dio todo sin pedir nada, A ti y por ti mi dama Escribo hoy mi alabanza.